Portar un traje de charro no es para cualquiera. Es un símbolo del criollo mexicano, un atuendo que requiere aplomo, galanura y actitud. Vestir de charro es arroparse con la identidad de un pueblo noble y apasionado. Un charro canta su alegría y su dolor.

A esa historia pertenece Alejandro Fernández, artista y representante de una herencia de charros cantores, auténticos embajadores de la identidad mexicana, grandes figuras como Pedro Infante, Jorge Negrete, Javier Solís y Vicente.

¿Qué hicimos para él?
Producción y logística del concierto en Octubre de 2017 en el Estadio de los Tomateros en la ciudad de Culiacán, Sinaloa.

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